Como tratar un ataque de ansiedad
Como tratar un ataque de ansiedad
Como tratar un ataque de ansiedad online
cómo detener los ataques de pánico por la noche
No te dejes llevar por el pánico. Es una frase que oímos innumerables veces al día. La oímos en una conversación, en la televisión, en las películas. Nos la decimos a nosotros mismos. ¿Por qué? Porque cuando entramos en pánico -experimentamos una intensa sensación de miedo o ansiedad en respuesta a un peligro real- es más probable que perdamos el control y reaccionemos de forma frenética o irracional ante acontecimientos potencialmente inseguros e incluso potencialmente mortales. El pánico inhibe nuestra capacidad de razonar con claridad o lógica. Piensa en la explosión de miedo, la histeria al límite que sentiste el día que perdiste de vista momentáneamente a tu hijo de seis años en el centro comercial. O la vez que su coche derrapó violentamente en una carretera empapada por la lluvia. Incluso antes de que se diera cuenta de lo que estaba ocurriendo, su cuerpo liberó adrenalina, cortisol y otras hormonas que señalan el peligro. Esas hormonas provocan reacciones físicas: palpitaciones, respiración superficial, sudoración y escalofríos, temblores y otras sensaciones físicas desagradables.
En algún momento de nuestras vidas, la mayoría de nosotros experimentará un ataque de pánico en respuesta a un peligro real o a un estrés agudo. Pero cuando los ataques de pánico ocurren o se repiten sin razón y en ausencia de peligro o estrés extremo, o cuando el miedo a experimentar otro ataque es tan fuerte que se cambia el comportamiento evitando ciertos lugares o personas, se puede tener un trastorno de pánico.
ataques de pánico rodantes
La recuperación es posible con un tratamiento adecuado, como la terapia de exposición, el entrenamiento de la atención y una serie de técnicas de gestión de la ansiedad que pueden ayudarle a controlar los síntomas. Puedes aprender las siguientes estrategias por ti mismo (utilizando libros o haciendo cursos, por ejemplo) o puedes consultar con un profesional capacitado. Manejo de la ansiedad Algunas de las opciones de manejo de los trastornos de ansiedad son: Aprender sobre la ansiedad El viejo adagio «el conocimiento es poder» se aplica aquí: aprender todo sobre la ansiedad es fundamental para la recuperación. Por ejemplo, la educación incluye el examen de la fisiología de la respuesta de «huir o luchar», que es la forma que tiene el cuerpo de enfrentarse a un peligro inminente. En el caso de las personas con trastornos de ansiedad, esta respuesta se desencadena de forma inapropiada ante situaciones que generalmente son inofensivas. La educación es una forma importante de promover el control de los síntomas. Mindfulness Cuando se siente ansiedad, una persona puede pasar una cantidad significativa de tiempo atrapada en pensamientos que provocan ansiedad. La atención plena nos guía para devolver nuestra atención al momento presente y desengancharnos de los pensamientos que pueden ser inútiles.
cómo es un ataque de pánico
El trastorno de pánico es una enfermedad de la que sabemos mucho. Se ha investigado mucho para averiguar qué tratamientos son eficaces, es decir, qué tratamientos ayudarán significativamente a alguien con trastorno de pánico.
Cada uno de estos tratamientos se describirá brevemente con las posibles ventajas y desventajas enumeradas. La elección del tratamiento puede depender de la habilidad del terapeuta, el coste u otras consideraciones.
¿Existe un tratamiento recomendado? Las investigaciones sugieren que la terapia cognitivo-conductual (TCC) es el tratamiento preferido, pero los antidepresivos inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina (ISRS) también se utilizan habitualmente. Sin embargo, un tratamiento eficaz debe incluir un tratamiento conductual para limitar la evitación. Hay que considerar la idoneidad de cada tratamiento en su caso particular. A continuación, se analizarán las opciones psicológicas y de medicación.
Tratamientos psicológicosTerapia cognitivo-conductualLa terapia cognitivo-conductual para el trastorno de pánico incluye tratamientos que cambian la conducta (exposición y manejo de la ansiedad, como la respiración lenta) y los que cambian los pensamientos que provocan ansiedad y preocupación (es decir, la terapia cognitiva). El objetivo es ayudarle a desarrollar una comprensión menos molesta de los cambios físicos que se producen cuando está ansioso.